Acceda ya desde nuestra biblioteca al nuevo documento elaborado por la Iniciativa de las Naciones Unidas sobre la Gestión Global de la Información Geoespacial.
A lo largo de la última década la comunidad geoespacial ha podido apreciar numerosos cambios: la explosión de servicios basados en localización (especialmente mediante internet y los dispositivos móviles) ha aumentado la comprensión popular de la necesidad de la información geoespacial, aumentando aún más el valor de la misma entre quienes toman decisiones de alto nivel en gobiernos y empresas alrededor del mundo.
«Desde el uso detallado de la información geoespacial en Egipto para estimular el crecimiento de su economía y hacer más eficiente su sistema de recaudación fiscal, hasta sus usos en España como pilar del manejo de la asistencia económica de su sector agrícola; de los usos de la información geoespacial en Brasil para reducir los índices de delincuencia hasta el uso en la República de Corea para la actualización de sus mapas catastrales y un mejor manejo de la tenencia de la tierra, la información geoespacial se utiliza cada vez más como parte fundamental de la infraestructura de un país«.
La ubicación sí importa: la información geoespacial es una pieza esencial para los países, por lo que vale la pena toda inversión en esta información, que generará beneficios que superan a la inversión misma.
Incluso en el caso de lugares donde los gobiernos luchan contra el hambre, las enfermedades o la escasez de recursos básicos como alimentos y agua, la importancia de contar con una base de información geoespacial precisa es muy elevada, siendo precisamente en estos países donde la sociedad puede beneficiarse más de ello.
